Deja de ver a México o tu país como el PEOR

Nota: Edición libre.
Todas las modificaciones de este texto se hace a base de los comentarios.
Deja tu seudónimo, firma y/o fuente para que puedan acudir a tu comentario
como una referencia.


Reflexionando sobre México (Pero podría ser cualquier país latino) como es de costumbre recuerdo ese pesimismo que nos ataca de vez en cuando.

Yo recomiendo jamás desistir, seguir platicando de este proyecto... ¿cuál? El que nos han prometido desde pequeños: El de ver una gran nación de la que estamos orgullosos. Tranquilo, tranquilo, aunque el hedor de ebriedad patriótica se asome esto no se trata de partidos, departamentos gubernamentales o instituciones con registro, se trata de ti, habitando en un entorno cercano (tu matria)

Dentro de los lectores hay varios fetiches.

Desde el más simple: escuchar el sonido de tu voz al leer hasta el más complejo el de la búsqueda de la precisión.

A México lo leemos desde una calle, un pueblo en terracería o desde lugares acondicionados,
desde un periódico pre-diseñado desde la composición de las palabras hasta las imágenes o desde un celular hecho en China.

A veces es difícil acordarse de que solamente lo estamos leyendo desde unos renglones de su historia, así que aparentar sobreponer la "verdad" de un elemento aislado -no cotidiano-, y hacerlo pasar por cotidiano, ¿no será hipérbole?

Y lo pregunto para no afirmar algo que pueda ofender la realidad de una persona que se empeña en gritar que esto está de la mierda, y sin embargo no propone, y si propone su propuesta siempre es previa a campaña política.

O bien, aquél que sigue terco en decir que 'esto es un pinche desierto', 'no si culiacá e un pichi rancho' o que en el monte "namás ái matitas".

La diferencia entre el "A mí no me consta pero lo veo en los diarios o el feibu" y "¡Esto está del culo!" es la de un lector no tan crédulo; consciente de que así como él falla, exagera, miente y se equivoca, otros semejantes a él, con intenciones desconocidas, están redactando eso con parámetros a los que el lector está completamente ajeno.

Ahora, ¿eres tú de los que por el hecho de encontrar algo escrito con buena ortografía lo considera verdad? ¿Te has preguntado quién es el autor de eso? ¿Qué hace y qué ha hecho para saberlo? ¿Has ido a su fuente? ¿Verdaderamente te parece verídica esa fuente?

Y, dejando de lado todo lo que has leído últimamente o siempre, te preguntarás si ese hecho o cualquier otro es determinante para afirmar que ya nadie debe dar otro paso en el mundo... La respuesta siempre será NO.

->Puede el individuo quedar sin piernas o ser el fin de la raza pero eso no le dará derecho al humano, a estos animales confundidos de que tenemos derecho a decidir que después de nosotros ya nadie más vivirá.

Siendo buen lector: no puedo confiarme de que el título que me promete la juventud eterna no tenga dentro de sí una intención. ¿Cuál de todas las posibles podrá ser la verdadera intención del autor?
Venderlo, practicar la escritura, ganar dinero a través de los anuncios, hacer una broma, continuar con un empleo para seguir viviendo, seguir las ordenes de otra persona, etcétera.

Vivir un país en el que no habitas más de 5 ciudades -está cabrón habitarlo todo- (y no quieras contar las rutas turísticas como la verdadera experiencia de México), supongo que no nos hace conocer al país por entero.
Cada quien se queda en la cabeza con el México que quiere ver.
Y no se puede forzar una verdad prologando un momento cotidiano aquí y en el mundo para decir que es característica intrínseca mexicana, decir "Oh sí, mi tierra, ahí todos matan, está en la sangre cahita we" sin caer ante los ojos de otro en una mentira.
Porque te miras al espejo, le preguntas a tus padres y a tus abuelos y todos niegan ser cahita. Porque no eres cahita, ni maya, ni español.

¿Los ojos de cuál otro? Del que ve a México desde lugares acondicionados o desde una calle en la que nadie ha muerto por asesinato de bala en años.

Comentarios

Entradas populares