Carta Abierta y Propuesta a la Industria Mexicana 2017

Martes, 29 de agosto del 2017

Saludos cordiales,

Me presento,

A dos años de terminar el curso de mi carrera y pausar mi investigación para la tesis, abandoné mi casa para comenzar a trabajar como vendedor de servicios en una consultoría empresarial. En menos de 9 meses logré especializarme en marketing digital; actualmente contribuyo al desarrollo de tres empresas: una de tecnología, un restaurant y un estudio-taller de lencería. Este último es un emprendimiento de mi novia en el que colaboro, y es en el que más he aprendido de la industria textil.

Nuestro negocio es un grano de sal frente a las grandes industrias a las que tratamos de comprar el material que necesitamos, y aún así encuentro in-competitividad en casi todas estas industrias con las que intento ponerme en contacto para obtener nuestra materia prima. ¿En qué sentido son incompetentes? No son accesibles a nosotros: Todos los que no vivimos en su región y podríamos comprar.

Buscando proveedores mexicanos de diferentes sectores industriales me di cuenta de que la mayoría de la industria mexicana se encuentra así:

Sus páginas web no sirven, ofrecen correos que no contestan, sus horarios de atención telefónica son muy limitados o no piensan en ofrecer alternativas simples y dinámicas como Whatsapp, o ni siquiera piensan en clientes fuera de su estado. No tienen un pensamiento global ni actual.

Todo esto forma parte de las políticas empresariales que están haciendo perder clientes, billetes y grandes oportunidades.

Frente a estos problemas usted podría decir que yo, el cliente, debería hacer el esfuerzo de ir al centro del país a buscar locales de proveedores, Pero no estoy obligado a hacerlo, y no lo haré si tengo a alguien que me dé estas facilidades:

1.- Evitarme el traslado y la investigación de la ubicación de tu negocio

2.- Evitarme esos gastos de dinero y tiempo

3.- Ofrecerme una imagen detallada de lo que voy a comprar y no sólo palabras en una llamada

4.- Observar/leer valoraciones ajenas del producto y experiencias de otras personas.

5.- Observación, productos, descripciones y recorridos virtuales en fotografías/videos disponibles las 24 horas accesibles en cualquier parte del mundo con internet.

Alibaba es un ejemplo a seguir para latinoamerica

Muy bien, lo que acabas de leer parece anuncio de páginas web, pero no lo es. Muchas de nuestras grandes industrias tienen páginas web hermosas, encantadoras, brillosas, fotografías increíbles... pero no tienen un botón de comprar ahora, o cotizar un artículo específicamente, o bien, simplemente han sido timados por creadores de páginas web y ni siquiera la página de Contacto te permite dejar mensajes.

Página a la que intentábamos felicitar por su orden, cuando intentamos enviar el mensaje nos dimos cuenta que muchos botones no servían. Obviamente no confiaremos en el botón "Comprar".

Buscando un distribuidor, hemos escudriñado en buscadores, instituciones estatales y organizaciones de industrias textiles para darnos cuenta de que muy pocas industrias de nuestro país tienen una página completamente funcional.

¿Qué hace una página web de una industria funcional? Vende por sí misma.

·         *Muestre la variedad de tu producto

·         *Categoriza correctamente tu producto

·         *Cotización y compra accesible

·         *Que permita contactar con la industria (sin errores en la página)

·         *Muestra medios de contacto (funcionales obviamente)

Y, bueno, ¿en qué nos es pertinente a mi la industria mexicana en general? Como interesado en ganar dinero: nada o muy poco. Pero como mexicano, como consultor empresarial, analista del progreso y también de su revés en mi país, y en el mundo, les pido de favor que sean competentes.

Veo en la mayoría de sus empresas grandes principios, misiones y visiones, pero no veo sus productos, y por lo tanto no veo su misión aplicada, esa misión que decía ser accesible, se esconde todavía en la era de la llamada por teléfono. Y es una cadena que continúa, tu proveedor inaccesible, y el cliente tan remoto y con tantas opciones antes que tú.

Estamos en la era visual, la era de los envíos y los pagos electrónicos o por oxxo. Y si no puedes si quiera pedirle a un empleado encargarse de actualizar sus medios de pago o de revisar los errores de tu página: quizá no estés destinado al fracaso, pero créeme, la juventud y las nuevas empresas no serán tus clientes, comprarán lotes a los chinos como Aliexpress o Alibaba. Perderás lentamente sin saber por qué.

Y, si conocemos la competencia, y sus virtudes, ¿por qué seguimos sin ser competentes? No es necesario apoyos gubernamentales, ni fondos perdidos, se necesita tener los ojos abiertos, la inteligencia para invertir en lo correcto, y los huevos para demandar o exigir a esas empresas que no les dejan bien sus páginas.

¿Necesitamos una crisis para entender o podemos ser precavidos ante la tormenta?

Compatriotas, empresarios, les pido que vean hacia el mundo virtual, y observen quiénes triunfan ante los grandes públicos: Empresas revendedoras de lo que compran a las grandes fábricas. Observa cada paso de la competencia como un paso que tú puedas dar, con tu esencia, pero no te quejes sin dar pasos.

¿Qué hacemos sin abrir canales de venta a minoristas en nuestras regiones, en nuestro país o por lo menos en páginas de ventas mexicanas? ¿Por qué no invertimos, como los chinos, en la creación de sub-marcas? ¿Por qué no buscamos distribuir de una forma no tradicional?

Es más… ¿por qué no motivamos a otros a que comiencen a ser emprendedores con el material de nuestra marca? Es más… ¿por qué no les ayudamos a ellos a vender? Porque su venta, es mi venta.

Yo tengo la respuesta amigos mexicanos. Lo que pasa, es que antes no pensábamos así. Hoy, podemos hacerlo diferente.

Si te parece una locura lo que estoy diciendo compara estas dos empreas: Parisina y LaFayette. LaFayette es colombiana, y estimula a los emprendedores con programas y créditos porque sabe que son su público y que lo deben fidelizar.

Parisina en cambio pues... continúa trabajando con su modelo desde hace muchos años, no se sabe si va a crecer o morir. Su página web sirve para que veas lo que probablemente ya sabías que era esa empresa y para promocionar su correo de contacto. Cuando digo que Parisina te hace ver lo que ya sabías es porque cuando tú buscas "Telas"

Dejemos de esperar inversionistas. Pongamos a prueba las páginas web por las que pagamos miles de pesos, ¿realmente funciona para lo que te prometieron que funcionaría?